Autor: admin

  • El mundo era esto

    Verano de ¿1990?

    Siempre me había fijado en la tienda canadiense que esté detrás de mi, ese naranja vivo cubierto de un azul inolvidable, esos colores que han sido tan importantes en mi vida, nunca había parado en mi rostro triste y roto.

    En este campamento fue la primera vez que me di cuenta de que nacer con un sexo determinado marcaría el resto de tu vida.

    Me separaron de mis amigos, chicos, porque era chica, fue la primera vez que me segregaron, y ahí empezó todo…

  • Fiestas del barrio de Comillas

    O cómo tratar de pertenecer a algo...

    Imagino que la necesidad de crear lazos y raíces es la que nos ha impulsado a meternos de lleno en este proyecto, de pronto parece fácil pertenecer a algo y que ese algo sea significativo. Las fiestas del barrio de Comillas han sido la excusa perfecta para formar parte de la Asociación vecinal de Comillas.

    Detalle de una de las gráficas realizadas para las fiestas.

  • 03 de junio de 2015

    La Plaza 2 de mayo – Proyectos hermosos que quedaron congelados.

    He intentado analizar el porqué, de todos los lugares increíbles que tiene Madrid, los que conozco y todos los que me quedan por descubrir, elegí La Plaza ¿en que momento eliges un lugar para analizar y seleccionas ese entre todos los demás?

    Para mi la Plaza se convirtió en un templo, no creo en Dios, pero hay veces que necesito estar bien conmigo, pensar, evadirme, necesito mirar y no ver o viceversa. La plaza para mi es lo más parecido a haber subido una montaña, estar en la cima y mirar todo el camino andado…

    En la Plaza te reinventas, y a veces hasta te descubres…

    La elegí por ellos.

    No le teníamos miedo a volar, deambulábamos por aquellas calles como si fueran los propios pasillos de nuestras casas, los pasos pocas veces nos desviaban del mágico destino final, si acaso hacíamos recesos antes o después en los bares de viejo que tanto nos gustaban, ellos mojaban las aceitunas, cacahuetes, pescaitos y torreznos en yayos y yo los mojaba en cerveza (no me gusta el vermut, porque sí, lleva canela), eran bares que habían visto cambiar las calles de Malasaña entre gritos, murmuros y anocheceres eternos.

    Pero siempre acabábamos donde teníamos que estar.

    Era el lugar donde podíamos pasar las horas muertas, creyéndonos reyes y mercaderes, soñábamos con aquel Euromillones que nos diese lo que creíamos que nos pertenecía de tanto repetirlo, sabíamos a la perfección como haríamos para darle el mayor y mejor uso a los 100 millones divididos entre los 5.
    Podíamos saltar por los tejados de los edificios y así llegar hasta el mar, podríamos haber escrito las novelas más exitosas y haber pintado los cuadros más hermosos.
    Y allí estábamos, sentados en el banco de siempre, desmembrando pipas y apagando la sed con esas refrescantes yonqui-latas que Susana se encargaba de reponer antes de que se acabase su contenido.

    Siempre comentábamos que en realidad si no hubiese peligro por la multa que te puede caer, la plaza es la mejor terraza de Madrid, con el mejor servicio, y la más económica. Aunque en realidad el servicio de tan atento a veces peca de agobiante, los que venden las latas, acompañados de sus carros de compra y siempre procedentes de China (esto es en la Plaza, porque en otras zonas de Madrid, son de otros países, en Lavapiés, por ejemplo, son de Bangladesh), van dando vueltas a la plaza una y otra vez, cada 5 minutos alguno de los vendedores te pregunta: -¿Selvesa?- Y tú tienes que a cada pregunta responder, -No gracias, aún me queda…- Así una y otra vez, una y otra vez.

    Lo que me maravilló de esta plaza desde el principio fue que cabe todo el mundo, un universo de experiencias y vivencias se dan cita en estos 5000 metros cuadrados, como si estuvieses recorriendo el planeta, puedes quedarte ahí sentada, mirando, y ver las peculiaridades de la realidad que habitamos, gente triste y contenta, niños que juegan y ancianos que pasean, infantes que aprenden a caminar, adolescentes que se dan los primeros besos y otros que sueñan con ser Ronaldo imitando sus gestos y celebraciones, hay niñas que quieren ser niños y jóvenes que olvidan con litronas, están los que venden material para evadirse de la realidad y músicos que ensayan los acordes que tocarán en el metro, hay parejas que se dicen cosas debajo de robles con apariencia de pinos. Estudiantes que soportan sus carpetas como adoquines y modernos que pasean sus últimos modelos, turistas despistados que sonríen al pasar y amigos que se reencuentran y abrazan, después de años de separación. Hay muchas nacionalidades distintas que ven al otro como a un igual, los que juegan al fútbol, haciendo de los bancos porterías y dando testarazos de los que hay que salvarse, cada cual tiene sus rasgos, ojos grandes y negros, otros verdes y claros, los hay con los ojos rasgados, blancos como la leche, oscuros de piel, hay pequeños de estatura y grandes de envergadura, verlos jugar es como ver un anuncio de esos que te hacen pensar qué grande es el mundo y qué pequeño eres tú.
    Después, o además, están los perros, que los perros tienen amos, amos que parecen perros y perros que se asemejan a sus amos, nos gustaba quedarnos embobados viendo los comportamientos “perriles”, allí sentada observando las relaciones entre ellos pensaba que cómo molaría ser perro, no tener que cumplir esas reglas que nos imponen bajo criterios en los que no creemos ni creeremos… A veces quisiera ser perro para ladrar a aquel que no me gusta y besar y lamer a aquel que acabo de conocer y me ha enamorado.
    La vida tendría que ser tan fácil como eso. Como estar en un banco sentado con tus amigos viendo la plaza pasar. Mi vida tendría que ser tan fácil como eso, como la Plaza.

  • 01 de octubre de 2014

    Llevo días queriendo escribir, pero esperaba que llegase este primer mesario para ponerme a desparramar las palabras que necesitan encuentro…
    Llevo 1 mes en el museo y no se bien que significa eso, demasiados sentimientos y pocos hechos, muchos proyectos y no tantos posibles.
    Los primeros días era inevitable hacer comparaciones con el INCUAL, y en todas las comparaciones, por mucho que me pese, siempre ganaba mi antigua beca, todo estaba más organizado para con los becarios, fue más fácil hacer amigos y tener un sitio, se sabía exatamente lo que no ibas a hacer y los que llevaban más tiempo enseguida nos abrieron camino en el cañeo y demás.
    Aquí llegué y no tenía programas para poder ejecutar mi trabajo, todo sigue igual, después de un mes, sigo tirando de mi portatil para poder desarrollar algo de todo lo que quieren hacer, la burocracia está muy bien instaurada en estos lares, no es de extrañar, joer, es el Prado, pero todo cuesta tanto…
    No tengo amigos, y no parece que vaya a tener

  • 07 de julio de 2014

    Las Residencias a quemarropa ya están aquí, llegó el día, el miedo ya se ha ido desvaneciendo con el inicio, llegamos a las 10:00 y fuimos conociéndonos.. nos van a dar desayuno cada mañana en October Press, fuimos a recibirlo, poco a poco te vas dando cuenta de que esto va en serio, que no eran boberías y que quizás, pueda servir para realmente volar. Lo más complicado de todo es que tengo que volver a mirar para adentro, y ahora sí saber expresarlo y contarlo.

  • 25 de junio de 2014

    25 de junio de 2014

    El pasado martes 17 de junio finalicé el mural en el Campo de la Cebada, casi un mes me llevó poder decir, lo he acabado, y es que mi mente siempre cree que puede llevar a cabo imposibles, y los imposibles, como su propio nombre indica, no son posibles.
    En un primer momento quise envolver el muro con papel, usando cola de carteles, embadurnándolo bien, quería crear la apariencia de caja, como los soportes que últimamente utilizo, pero la obra no duró ni un día, al día siguiente, sin haber acabado la obra, ya se había despegado… eso fue hace un mes casi, y hubo algún intento de volver al Campo, pero sin éxito, o por mi «ajetreada» vida o por percances en mi empeño no ha sido hasta hace justo una semana que he podido enfrentarme a la obra.
    EL motivo, aunque uno de ellos en la misma línea que el primero, ha cambiado, el otro mural, el de la tienda de campaña es el inicio de algo que quiero llevara a cabo..
    Os invito a que os paseís por el Campo de la Cebada, y no por ver mi obra, que también me gustaría, sino porque realmente es un espacio que merece la pena ser vivido.

  • 25 de junio de 2014

    HUBO UNA BAJA Y ENTRÉ YO…
    He sido seleccionada para las RESIDENCIAS A QUEMARROPA, durante 15 días formaré parte de un grupo de artistas que tendrán la posibilidad de estar en contacto con profesionales del mundo del arte. Aún no me lo creo, tengo miedo, mucho miedo…
    Era mi sueño y ahora es real, que te tomen en serio o una oportunidad…

  • 24 de abril de 2014

    24 de abril de 2014

    Ayer inauguré exposición en El Gallinero, quizás la exposción más íntima hecha hasta la fecha, en la que más me he desnudado y con la que me he sentido más agusto, creo que es el camino de lo que necesito ahora mismo, ser sincera conmigo misma y de paso intentar curar lo que está dentro y pica…

  • 25 de marzo de 2014

    25 de marzo de 2014

    Aquellos que saben de quitar, no podrán conmigo,
    ya no,
    porque no tengo miedo,
    no puedes quitar lo que no se tiene.
    NO TENGO MIEDO,
    ya no.
    Dicen que cuando no se tiene nada ya no se tiene ni miedo,
    Nada que perder y el mundo entero por ganar.
    Me desnudo,
    me bajo las bragas y me levanto el vestido,
    entonces me preparo,
    cojo las tijeras y arranco la larga melena de mi rostro,
    me permito quitarme el pelo porque es MÍO
    y no tengo que preguntarle a nadie si me da permiso para hacerlo.
    No creáis que esto no cuesta…
    Me sudan las manos y el corazón me palpita más rápido que nunca.
    Pero ya no tengo miedo y puedo hacerlo.
    No quiero herir a nadie,
    de verdad que no quiero,
    sólo pretendo salvarme, salvarme a mí y a los míos…
    al final esto consiste en eso, ¿no?
    ANDE YO CALIENTE Y RÍASE LA GENTE (Góngora)
    Se llama PURGATIVO,
    Y sirve para purgar, y purgar es
    tr. Limpiar o purificar una cosa, eliminar lo
    que se considera malo o perjudicial:
  • 19 de marzo de 2014

    19 de marzo de 2014

    Esto se acaba.
    Señores y señoras, fue un verdadero placer contar con ustedes durante estos tres años, pero ahora se acaba…
    Volveremos a vernos, o no, en el camino, deambularemos por las visicitudes de la existencia y quizás no seamos más felices, pero seguro que lo habremos intentado.
    Os quiero, y nos vemos allá fuera, donde quema el Sol y la lluvia moja.

  • 18 de noviembre de 2013

    Me siento superada, ha sido como
    meterte en un túnel del tiempo donde lo malo había desaparecido y
    todo estaba hecho de buenos y alegres recuerdos, todo lo maravilloso
    que construimos y descubrimos entonces, aparece justo ahora cuando
    más lo necesito, se hace eco para asistirme en este arduo viaje que
    sólo acaba de empezar. Como una estrella polar, seguiré vuestros
    recuerdos para encontrarme, como hacía nuestro ángel Michael.
    La vida en general no nos ha tratado
    mal, pero aquello supuso empezar a caminar poniendo el listón muy
    alto, cualquier cosa a partir de ese momento, y lo teníamos todo por
    hacer, se pondría al lado para compararse y ponerse a juicio, casi
    nada, en todo este tiempo, ha superado aquello que hicimos, aquello
    que compartimos, cosas pequeñas e intensas que nos enseñaban todo
    lo maravillosa que podía ser la vida. Amé, subí montañas, planté
    árboles, reí a carcajadas, y aprendí a vivir sin aquello. Se
    desvaneció. Hoy quiero saber como se definió, como se elaboró,
    como hicieron Chus y Víctor para poder cumplir ese sueño de todos.
    He hecho muchas cosas mal en este
    tiempo, me olvidé de mirar alrededor y miré demasiado para adentro,
    traté de ser feliz e hice daño en el intentó, ahora me siento
    perdida, como esta sociedad, falta de valores. Quiero parar, como
    ayer mismo me decía Michael, its time to stop and to think what I
    want, what I really need. Ahí voy, a parar y a pensar que quiero de
    mi, qué es lo que necesito y dónde. Tened la certeza de que en
    cualquiera de esas decisiones, vosotros estaréis presentes para
    determinarlas, gracias por la ayuda pequeños, os quiero.
  • 14 de octubre de 2013

    De repente me encuentro rebuscando entre textos olvidados una señal de que fuese real…
    Como quien buscase un objeto de valor en un vertedero.

    Sólo dejé el título de una entrada sobre aquello, nunca me atrevía a escribir en público todo lo que dolió la ruptura, aunque por derramar, derramé litros de un compuesto mágico hecho de lágrimas, acrílicos, carbón y tinta.

    Cuando apenas llevábamos meses, cuando era todo bonito y perfecto… cuando nos deseábamos en cada rincón y sabíamos que pronto nos tendríamos que separar, él me regaló una libreta, una libreta preciosa en la que escribió cosas de nosotros, en las que me dedicaba canciones, pegó fotos e hizo dibujos en un intento de hacer algo que sabía que no iba a defraudarme… Fue uno de los regalos más bonitos que nadie nunca me ha hecho, la libreta tenía muchas hojas en blanco y me invitaba a que la escribiésemos entre los dos con nuestra historia…

    Yo acepté el reto, con tanta torpeza, que una de las primeras cosas que escribí fue una preciosa poesía del gran Pablo Neruda… antes de escribirla apuntaba: “Ojalá esto nunca nos pase, pero si algún día pasase… esto sería lo que te escribiría…”

     Ahora me encuentro con la necesidad de hacerlo…

    “Puedo escribir los
    versos más tristes esta noche. 
    Escribir,
    por ejemplo: » La noche está estrellada,
    y tiritan, azules, los astros, a lo lejos». 
    El
    viento de la noche gira en el cielo y canta. 
    Puedo
    escribir los versos más tristes esta noche.
    Yo la quise, y a veces ella también me quiso. 
    En
    las noches como ésta la tuve entre mis brazos.
    La besé tantas veces bajo el cielo infinito. 
    Ella
    me quiso, a veces yo también la quería.
    Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos. 
    Puedo
    escribir los versos más tristes esta noche.
    Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido. 
    Oír
    la noche inmensa, más inmensa sin ella.
    Y el verso cae al alma como pasto el rocío. 
    Qué
    importa que mi amor no pudiera guardarla.
    La noche está estrellada y ella no está conmigo. 
    Eso
    es todo. A lo lejos alguien canta. A lo lejos.
    Mi alma no se contenta con haberla perdido. 
    Como
    para acercarla mi mirada la busca.
    Mi corazón la busca, y ella no está conmigo. 
    La
    misma noche que hace blanquear los mismos árboles.
    Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos. 
    Ya
    no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.
    Mi voz buscaba el viento para tocar su oído. 
    De
    otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
    Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos. 
    Ya
    no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
    Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido. 
    Porque
    en noches como ésta la tuve entre mis brazos,
    mi alma no se contenta con haberla perdido. 
    Aunque
    éste sea el último dolor que ella me causa,
    y éstos sean los últimos versos que yo le escribo. «

    El final de nuestra historia estaba escrito bastante antes de que llegase el final, los dos sabíamos que se iría, y que con la partida, se acabaría nuestra relación, no porque dejásemos de querernos, no porque no nos deseáramos, sólo porque ya no podíamos estar juntos, ya no nos soportábamos. Lo que no sé, o sí y es lo más triste de pensar, es el por qué no nos separamos antes, por qué dejamos que las malas formas se instalaran a nuestro lado como compañeros de piso…

     El día que nos separamos, después de haber estado juntos 3 años y 3 meses, con 2 años de convivencia, nos despedimos con un pico y un abrazo, yo no me esperé en el aeropuerto para verle partir, para acompañarle en los últimos momentos de su vida en Elche. Hasta pasadas dos semanas no me di cuenta de lo que había sucedido… Le perdí… Durante el primer mes le escribía como si aún fuésemos pareja y me tuviese que querer, como si tuviese que serme fiel… El luto por su pérdida fue insoportable…

    Él me escribió a los 5 días de marchar tratando de expresar lo raro de la situación… poner palabras a algo extraño que no eres capaz de definir. Me dijo que quería hacerme saber que seguía sintiendo algo, un algo sin adjetivo, un algo de importancia, un algo de miedo y de vacío, ese mismo algo que yo sentiría más adelante cuando él recorría toda Latino-américa y yo me quedaba en el mundo que habíamos compartido. 

    Siempre supimos que no podíamos estar juntos, que lo mejor era lo que había sucedido, pero Dios, qué duro es acostumbrarte… El día antes de partir a su periplo, el 28 de diciembre de 2011 me habló de sentimientos por última vez, abrió su corazón de esa manera tan tierna que le había caracterizado en nuestros días de vino y rosas:
    “hola little. solo queria decirte un final adios porque creo que lo mereces mas que nadie. quiero que seas feliz y que no me olvides y que aunque no seamos novios , seguiras siendo algo importante para mi en la vida y espero que yo pueda ser algo importante tambien para ti. bueno ya me despido. be happy little. y suerte con todo. y hablaremos algunos de los dias cuando ya yo este en mejico o algo y me contaras que tal. Un besito xxxx” 


    Me agarré a estas palabras como si mi vida dependiese de ello… Las repetí infinitamente… Efectivamente nos perdimos de la noche a la mañana. Durante meses y meses fui incapaz de acercarme a un hombre de verdad, no quería que me pudiesen dar placer o cariño, estaba despechada, herida y era peligrosa… Me perdí cosas, o no. Y aún, sus fechas señaladas, eran las mías y le busqué, una y otra vez, y no le conseguí…
    Hoy han pasado ya casi 3 años, le he vuelto a ver en dos ocasiones como unos tres minutos en total, a veces hablo con él, las nuevas tecnologías es lo que tienen… Le aprecio mucho, quiero que sea feliz, que la vida le sonría y que no le hagan daño, pero:

    “Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto le quise”.


    Dentro de 12 días haríamos 6 años juntos.

  • 2 de octubre de 2013

    2 de octubre de 2013

    Fue tan maravilloso participar en este proyecto de Virginia Rodríguez
    con su cuento E-U-LOGIO CARACOL,
    Y todo lo que nos queda por llegar!!!
    😉 Gracias VIrginia!!!
     

  • 19 de septiembre de 2013

    19 de septiembre de 2013

    Trobava la manera de dir les paraules més boniques al foc…
    Cuinava per a deixar clar quant els volia.
    I sempre trobava resposta…
    Els plats buits.

    (Hallaba la manera de decir las palabras más bonitas en el fuego…
    Cocinaba para dejar claro cuánto los quería.
    Y siempre recibía respuesta…
    Los platos vacios.)

  • 9 de septiembre de 2013

    9 de septiembre de 2013

    En la parte de atrás de mi casa hay un canal tapado por un camino, para
    acceder tienes que caminar unos 100 metros por un sendero pegado a un barranco,
    el barranco tiene un puente por el que pasa este canal. Cuando éramos pequeños,
    mis primos, mi hermana y yo, con los perros y no sé si también con mis tíos y
    mis padres íbamos a bañarnos por el canal, el canal llevaba el agua de riego
    que abastece a todo el sur del campo de Elche, la experiencia era genial, el
    recuerdo está grabado por la intensidad de las sensaciones.

    A veces hacíamos excursiones también por el barranco, lo bajábamos
    arrastrando los culos a modo de tobogán, la pendiente era pronunciada, lo es
    ahora en realidad, porque entonces no existían ese tipo de miedos… A veces
    aún recorro esos lugares que han dejado de ser tan inmensos y bonitos como
    entonces, y la nostalgia recorre mis venas.

    A veces, en las piedras enormes que había debajo del puente encontrábamos
    perros muertos, algunos los intuíamos por las patas que quedaban fuera de las
    bolsas de basura, otras veces estaban ahí tirados, sin bolsa ni nada, recuerdo
    como si fuera ahora el impacto que aquello causaba en mi… no podía entender
    aquello… lanzaban a sus perros desde 10 metros al vacío para que chocasen
    contra piedras y los dejaban ahí, hasta que el paso del tiempo y el Sol
    abrasador del levante intentaba borrar las pistas de la barbarie, pero nunca
    pasaba… siempre quedaban los huesos… y la memoria… Ya no he vuelto a ver
    desde hace mucho… Y no sé si es que casi no paso por allí o que ya no hacen
    ese tipo de barbaridades.

  • 2 de septiembre de 2013

    2 de septiembre de 2013

    Vuelve todo a colocarse donde no debe, los días hermosos de los almuerzos con jínjoles han dado paso a tristes paseos con olor a pis. A lo largo de todos estos años ha habido pocas veces que ir a trabajar o a estudiar fuese un suplicio, una penitencia, era señal de que algo no funcionaba. Y es lo que está ocurriendo. Este lugar me consume, debo encontrar un nuevo lugar donde pueda ser feliz profesionalmente.

  • 2 de julio de 2013

    Hacía mucho tiempo que no contaba los días, ha vuelto a ocurrir, los estoy volviendo a tachar…
  • 21 de junio de 2013

    Me ha vuelto a picar el virus del mal. Perdida me encuentro, necesito ese remedio mágico que convierta mi mente y al ma en un lugar estable y tranquilo
  • 30 de mayo de 2013

    Todas las mañanas se sentaba en aquella misma esquina, todas las mañana a la misma hora yo pasaba por el escaparate de aquel bar que satisfacia las barrigas de funcionarios, guiris y ejecutivos, y él, un chico de unos 25 años , con los ojos como surcos en un rostro casi perfecto, siempre estaba allí. Para mi era un alivio, sabía que al menos a las 8 mi vista iba a gozar de la belleza masculina. Pero hoy no estaba… Me preocupó, me he agobiado, he tenido que parar mi paso, he tenido que buscar entre las mesas a ver si por algún casual ese hombre que ahora ocupaba su lugar, se había simplemente adelantado. Menos mal, así es, estaba ahi metido entre el resto de mortales disfrutando de su cafe y leyendo de su ipad o movil las últimas noticias que nos acosan. A veces ocurre, que la rutina nos conduce a pensar que conocemos a esas personas que cada día nos acompañan en nuestro quehacer cotidiano. No se como te llamas, aún no lo se, pero sin duda te conozco, se que fumas, que eres serio y que te gusta estar al día en las últimas nuevas.
  • 27 de marzo de 2013

    Tu mirada, resplandor en calma de mis tinieblas,
    tus palabras, antídotos contra el absurdo cotidiano que me acecha.
    Y tu ausencia, ésa, la que me acompaña,
    la que poquito a poco se va apoderando de todo lo que soy.
    La sombra que observa dormida las casas de la gente que ha
    olvidado de donde viene.
    Las miradas perdidas de aquellos o estos,
    de los que hemos olvidado sus nombres.
    Nuevos seres se apoderan de nuestras mentes,
    nuevos engendros que descubrirán bajo unos grandes ojos sus
    penas y angustias
    de un mundo que va oliendo a putrefacto.
    Volver a escuchar un susurro que me dé lo que nunca escuché.
    Sentir algunas caricias que envuelvan la felicidad con algo
    mío.
    Querer,
    sentir que soy querida.
    Que una cucaracha negra se acerque a un rosal de tronco
    ancho y pinchas grandes,
    con el capullo apunto de abrirse,
    cucaracha pequeña y sabia que se atreve a escalar,
    a pasar por las puntas electrizantes y llegar a la cumbre,
    donde se encuentra lo único que merece la pena de esto,
    de la mañana,
    de la noche.
    Soy un bicho oscuro tendido sobre una tormenta de ácido.
    Siento como se deshace el soporte que me aguanta y sola,
    totalmente sola.
    Nadie hay cuando nada ves,
    mi vida se quedo allí,
    aquí sólo me queda un charco que bajo un Sol vibrante se va
    secando.
  • 1 de febrero de 2013

    Ayer se inauguró la exposición Errando por Madrid, me volví a descargar, volví a sentir miedo y taquicardia, volví a sentir lo que nunca quiero volver a sentir, y a desear eso que sólo algunas cosas te dan. Tuve sorpresas muy gratas de amigas que hacía una eternidad que no veía, y de otros y otras que no esperaba encontrarme allí. La alegría de estar rodeada de aquellos a los que quieres. Gracias a todos por vuestra presencia. A Patri por haberlo hecho posible, a Elena y Nicolás por las herramientas que me consiguieron desinteresadamente en su momento para desarrollar la obra, a Luís Ángel Abad «Koldo» porque como gran maestro y profesor, después de 4 años aún retumban sus palabras en mi mente. A todos los que habéis hecho posible con vuestro día a día y vuestra compañía que esto saliera adelante, porque Madrid sin vosotros no hubiese sido nada… I a vosaltres pares i tata, per existir.
    Errando por Madrid:

    Hace varios años empecé a hablar del significado del recorrido en la configuración de nuestra identidad, de cómo los caminos que deambulamos se convierten en cicatrices en la estructura de lo que somos. Hoy estoy en Madrid, y tengo demasiados pasos arrastrados por estas aceras, la búsqueda de la felicidad congelada en azulejos que llegarán a configurar mi “hogar”.
    Recorriendo aprendemos, es viviendo como sacamos el mejor provecho a nuestra formación. Aplicando en cada paso lo que ayer vimos o recordando lo que antes de ayer escuchamos. Es de ésa, la única manera de la que sacaremos la esencia de la vida, recorriendo, atentos, alerta. 
    A modo de diario en el proceso que desarrollo, cargada del maravilloso invento de poseer una cámara en mi bolsillo las veinticuatro horas del día, ataviada también de una libreta y un boli, he aprendido a sacar provecho de la nada. Llevaba tiempo queriendo construir algo con todo eso que se amontonaba en mi cabeza, libretas y ordenador, como esos puntos en el camino que deciden un quiebro, cambio de sentido, cada uno de estos ”azulejos” son un parón, un tropezón de ese vomito. He construido mi hogar errando por Madrid, ahora este es mi lugar.


    Azulejos blancos de 20x20cm

  • 11 de enero de 2013

    Ha empezado el nuevo año y con él, las ganas de subirme a ese toro enfurecido y cabalgar por encima de todas las barreras y fronteras agarrándome a los estribos con fuerza y rabia.
    Estas navidades he estado en casa y he aprovechado para recoger todo aquello que mis padres como tesoros han ido colgando por todas las paredes, parece un museo de obra artística mía, las fotos son calidad móvil, pero ya tenía ganas de recogerlo, a veces creo que no le he dado importancia a aquello que he ido haciendo, si yo no tengo aprecio por aquello que hago, quién lo va a tener.

    Son cuadros en su mayoría viejos, algunos de cuando aún iba al colegio, otros de inicios del instituto, experimentaciones, y regalos apresurados, como en el caso del cuadro de mi abuela, que se lo prometí durante mucho tiempo, cuando aún vivía, y lo fui dejando y dejando y un día enfermó, y entonces corrí para acabarlo, quería que ella fuese capaz de reconocerse, necesitaba llegar a tiempo, tuvo en medio de aquel infernal mes un periodo de mejoría, lo acabé, y quiero pensar que ella sabía lo que le enseñaba, sabía que era un retrato suyo, que aunque tarde había llegado a tiempo, a la semana de aquello, murió. Hoy el cuadro, mi madre, su hija, lo tiene colgado en su estudio.



  • 27 de diciembre de 2012

    Hoy me he enterado que el 31 de enero inauguraré mi primera exposición en Madrid. Tengo miedo, pero a la vez, una inmensa sensación de felicidad, no hay mejor manera de empezar un nuevo año decisivo, cuando veo que las cosas se ponen turbias, me inyectan una enorme cantidad de fuerza.
    Ayer acabé de leer el libro Éramos unos niños de Patti Smith, maravillosa biografia de 2 artistas que vivieron momentos de eclosión en el NY de los 70’s, ese mismo NY de Gordon Matta-Clark, ese NY donde todo estaba por hacer y no tenían miedo a nada.
    Cuando Tati me recomendó el libro no sabía que se convertiría en una especie de Biblia para mi, quiero que el libro se convierta en mi credo, aprender a desarrollar por el mero hecho de crear, tener fe en lo que hago y conseguir que el miedo se aleje hasta que ya no lo pueda divisar.
    Mi propósito de Año Nuevo va a ser eso, que el 2013 se convierta en un punto de inflexión para crear sin parar, desarrollar obra y creer en mi.
    No quiero que ni las drogas ni la muerte me encuentren, no necesito que eso ocurra para ser eficiente, Necesito pensar en Patti y Robert en el 69, cuando se encontraron y supieron que iban a hacer algo porque tenían la necesidad de hacer. Quiero creer en ellos para creer en mi.
  • Otra vez

    A veces desearía poner en práctica algo de lo que me
    propongo a diario, ser una de esas chicas que es capaz de tener fuerza de
    voluntad y dejarse de fumar cuando realmente lo desea, o adelgazar esos kilos
    que siempre ha sabido que le sobraban. Pero no soy de esas, soy de esas otras
    que rellena libretas y libretas haciendo calendarios y marcando con rotulador
    la fecha límite que siempre acabará esperando entre dibujitos y palabras,
    arrinconado en una estantería de la habitación a pasar a mejor vida.

  • 28 de noviembre de 2012.

    Prometo que esto no va a acabar así, encontraré la manera de que todo llegue a buen puerto, que las ideas y los pronósticos se situen en un buen lugar.

  • 22 de noviembre de 2012.

    ESte chico del dibujo es Uba, y es muuuuy especial, ahora
    vive en Brighton, antes vivió en Palma, y antes de eso, en Elx. Tuvo que irse
    para INglaterra, porque aquí, en España no encontraba curro. María, que también
    es muuuuy importante en mi vida, también se tuvo que marchar a buscarse la vida
    en otros lares, y por el camino que voy, puede que yo también tenga que
    hacerlo. No tengo miedo, puedo hacerlo, creo que estoy preparada, lo único que
    ocurre es que no quiero dejar mi vida en MAdrid, aquí soy muy feliz, y no me
    gusta nada la idea de tener que dejarlo todo por aquí…



  • 21 de noviembre de 2012

    El otro día rescaté una historia de una de las libretas
    olvidadas en mi habitación. Corría el año 2006, había vuelto a Madrid de Irlanda
    para hacer el «máster» de Diseño y Montaje de Exposiciones, estaba
    «desarrollando» el pabellón de Photoespaña y empezaba a
    «trabajar» de lo mío.
    -¿Qué es el olvido?- Le preguntaba una y otra vez.
    -No te lo puedo explicar porque no lo has vivido, no lo entenderías.-
    -Pues dime como se hace, lo hago, y luego me lo explicas.-
    Entonces le contó como se hacía, y ella obedeció, lo hizo, y él ya nunca tuvo que explicárselo, porque ella le olvidó.
  • 21 de noviembre de 2012

    Hace días que no presto atención,
    tengo que reinventarme,
    han sucedido demasiados hechos de la última vez hasta hoy.
    Tengo que buscarme la vida,
    y no se por dónde empezar.

    Hay un nuevo proyecto que quiero llevar a cabo, en un principio iba a ser un blog, pero por miedo a que eso no se formalizase, he tenido que transformarlo en un librito ilustrado. Sólo adelanto que tiene que ver con lo que ha supuesto para mí, la llegada a Madrid, y en particular al piso. Y cómo aunque las épocas pasen y todo se transforme, alimentarse sigue siendo de los mayores placeres de la existencia humana.

    En breve voy a tener que dejar el taller, las cosas se han complicado y me quedo sin trabajo. Pagar 120 euros para mantenerlo si no encuentro nada antes de enero va a ser imposible, lo bueno es que ya he entrado en la dinámica, y dará igual el lugar, o al menos eso espero.

    No he avanzado, sigo con los mismos miedos, pero al menos no me he quedado paralizada, estoy desenvolviéndome, pero sin hacer nada coherente ni con un discurso.
    Hay conceptos que reflejo en libretas pero no consigo desarrollar en algo físico.
    Necesito ayuda para aclarar todo lo que soy y quiero.
    Aggggggggghhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!!!!!!!!!!!!!!!!
  • 30 de octubre de 2012

    Tengo tanta ilusión puesta en la vida que a veces me sorprendo de que haya cosas que no valen la pena.

  • 24 de octubre de 2012

     Los males que me acompañaban me siguen persiguiendo allá donde vaya, el
    mal no está en el exterior, no es ajeno a mi ser, soy yo la que incumple
    y deshace todo lo que se propone, a veces creo, o me parece vislumbra
    un matiz de cordura, que todo se arreglará y voy a cambiar, pero la
    incapacidad de mantener mi palabra me obliga a estar insatisfecha con
    mis hechos.

  • 09 de octubre de 2012

    Ayer fue mi primer día trabajando en el taller, y fue maravilloso. Me
    sentí completa y realizada, era como si todo este tiempo, todo, me
    hubiese estado llevando hacia ese preciso intante en el que me volvía a
    encontrar la materia.
    Tengo un poco de miedo porque no se si lo que puedo llegar a hacer va a
    valer la pena, si el resultado final va a tener movimiento y cabida.
    Pero bueno, como siempre digo, mientras camino hago, así que lo seguiré
    intentando mientras pueda.
    Los hombres de traje tuneados.
  • 29 de agosto de 2012

    El
    atajo de teclados Ctrl+Z ha hecho mucho daño en la condición humana,
    cuántas veces hemos deseado extrapolar ese movimiento de dedos a nuestra
    rutina sin resultado ninguno.

    Recuerdo
    cuando estudiaba diseño de interiores, que como consecuencia de pasar
    horas y horas y horas frente al ordenador con el autocad, cuando salía a
    la calle iba tecleando en mi mente todos mis movimientos, ya no se
    cuales eran esos pasos, pero si que me obsesionaba no ser capaz de
    abandonar la visión de la pantalla en mi vida cotidiana.
    Con
    el Control Zeta es distinto, es más un deseo. Quisieras volver a atrás
    cuando cometes errores, deseas retroceder hasta el preciso instante en
    el que ese error te dejó en evidencia o hizo que él se fuese para no
    volver.
    El
    hecho de no tener la capacidad para borrar aquello que hicimos mal, o
    que simplemente no hicimos como hubiesemos deseado, hace que la mayoría
    de las ocasiones nos contengamos, no hagamos, no caminemos y no
    desarrollemos proyectos ni cuadros, tenemos miedo a no estar a la
    altura, y que quede en evidencia el borrón, la mancha de haber errado.
    El
    miedo nos deja paralizados, el miedo nos aprieta contra el suelo y nos
    deja con la duda de cómo hubiese sido si hubiésemos emprendido ese
    viaje.

    Velázquez
    no tenía miedo al error, movía y modificaba sus cuadros una y otra vez,
    sabía que al final saldría aquello que andaba buscando, que aparecería
    antes o después la genialidad por la que hoy reconocemos su obra.

    El
    pentimento hoy no sólo sirve para demostrar autorías de artistas, que
    en su virtud de humanos, se equivocaron o arrepintieron, sino que además
    sirve para demostrarnos una vez más que rectificar es de
    sabios, o de humanos.
    En mi caso, la necesidad de negar lo que ha costado mucho tiempo de elaboración, es el adelanto a la posibilidad del fracaso.
  • 27 de agosto de 2012

    Los
    recuerdos se vuelven difusos con la distancia. Aunque haya cosas que
    nos empeñemos en no olvidar, el pasar de los años, la acumulación de
    sucesos y de nuevas memorias hace que lo que un día fue nuestra razón de
    ser, ahora sólo sea un vano entorno de ojos con sucesión de imágenes.

    Aun así,
    aunque de ese recuerdo sólo guardemos una imagen, esa imagen se
    convierte en nuestra obsesión. Aquellas imágenes se convirtieron en mi
    obsesión.

    Han
    pasado ya 13 años, y en estos 13 años he repasado una y otra vez  los
    trazados y colores de todo aquello. Una vez más, un viaje del que
    guardas puntos en el camino.

    Alguna
    vez he conseguido trazarlos, pero siempre le daba al freno cuando
    juntaba más de 10 líneas. 
    Cuando dibujo, siento lo que dibujo, a cada
    chorro de tinta evoco lo que trato de conjugar, y en este caso, o por el
    dolor o por el placer, no podía seguir. Pero creo que ha llegado el
    momento, creo que estoy preparada, y sobretodo creo que vale la pena que
    lo deje inmortalizado, que el tiempo no me borre más de aquello, que se
    convierta en pieza, que tenga el espacio que merece, que de tan adentro
    surja lo que siempre ha estado adormecido.
    Lo amaba, lo amaba como se ama aquello que no se puede tener, aquello que con un simple olor te desnuda y estremece.
    Lo
    deseaba, aquello era más fuerte que yo, mi cuerpo palpitaba al tenerle
    cerca.
    Él
    tenía 8 años más que yo y era mi monitor, yo había cumplido los 17 y
    tenía el mundo por delante para agarrarlo y tragármelo, y él estaba
    ahí, haciendo realidad todos los sueños que volaban por mi cabeza de un
    futuro esperanzador, recordándome a cada segundo todo lo que podía llegar
    a ser, todo lo que me esperaba si seguía mi camino. Me perdí, la salida quedó demasiado lejos y en el intento fracasé.
  • Madrid

    El martes hará 4 meses ya de mi llegada a las aceras madrileñas, y todo ha ido mejor de lo que podría imaginar, los planetas se alinearon o en otra vida hice las cosas bien, o simplemente el azar hizo que todo fluyese. Llegué para poder soñar y sueño a menudo. Vine para poder crear y creo constantemente. Quise creer y creo.
  • O de como se hacen las cosas bien.


    Ejemplo de como se puede hacer algo que vale la pena tener como página principal de internet. ¿Por qué? Porque te da fuerzas y ganas y deseos… Porque te hace ver todo lo que te estas perdiendo, y la maravilla de esa cosa llamada arte.

  • A casi un mes que le perdí…

    He crecido entre papeles de periódicos, así va a empezar esto, de la manera más absurda, contando que he crecido entre «países» e «informaciones», desde que tengo uso de razón, y mientras me han permitido los avatares de la vida, en mi casa ha habido periódicos diarios que se analizaban y leian minuciosamente, so pena que tu no lo hicieses, eso te dejaría fuera del grupo que ha supuesto mi familia. Lo de los libros igual, aunque ahora no me atañe hablar sobre ese hecho.
    Pero en lo que respecta a los periódicos, pese a quien pueda molestar, los recuerdo como un yugo. Soportar la carga de saber que si no tenías idea de lo que pasaba en el mundo era porque no te apetecía mirar esos papeles que tus padres y hermana estudiaban. Fue demasiado tarde cuando aprendí a disfrutar con las imágenes maravillosas que aparecían (sobretodo en El País) muchas veces.
    Llevaba años queriendo hacer algo con esto y hoy es el día.
  • Hoy empieza todo

    5 de octubre de 2010 a las 12:27.

  • ayer EMPezó TODO.

    El mundo se caía y yo no era capaz de pensar en nada más que en su ausencia.